12 junio, 2013

UN MOTIVO MÁS PARA PARARSE DE LA MESA


Este Gobierno si que tendría razones para decir que una cantidad de situaciones están poniendo en riesgo las conversaciones de paz, pero por el contrario, vemos un gobierno totalmente postrado ante la actitud soberbia y pedante de estos criminales

Si hay algo que me cause un sentimiento profundo de indignación, es ver que, no pasa una sola semana, sin que los principales diarios de nuestro país tengan en su portada como protagonistas a los bandidos de las FARC.

Está bien, sabemos que el tema de la paz, querámoslo o no, es una de las principales noticias del país, porque además es tal vez el único salvavidas que tiene Santos para dejar algo medianamente rescatable de su gobierno, esto si se da el hecho de firmar algún tipo de acuerdo con las FARC por más inicuo que este sea, lo que por lo menos le daría algo para mostrar, pero de ahí a que nos quieran meter por boca y nariz a los bandidos de las FARC ya es otra cosa, ahora los quieren hacer parecer honorables miembros de una junta directiva que salvará a Colombia. Absurdo!

No siendo suficiente la indignación que produce ver a los Narco-terroristas en los principales diarios, debemos soportar un gobierno totalmente sumiso y postrado ante las pretensiones de una fuerza armada ilegítima, cuasi-derrotada en el campo militar a finales de 2010, que pretende ser quien determine el rumbo del país y peor aún el actuar del propio presidente de la república elegido (en mala hora) por voto democrático, superando los 9 Millones de votos, cifra que supera por mucho a los pocos miles de terroristas que son quienes hoy nos dicen que debemos o que podemos hacer.

3 acontecimientos de los últimos días han fastidiado a la nobleza de las FARC instalada en La Habana: 

  1. El recibimiento a Henrique Capriles por parte de Juan Manuel Santos
  2. El anuncio de la pretensión de Colombia de querer pertenecer o adherirse a la OTAN y  
  3. La negativa, por parte del gobierno,  a la petición del aplazamiento de las jornadas electorales de nuestro país. 
Todo esto ha sido calificado por los miembros de las FARC como situaciones que ponen en riesgo la vida de los diálogos de Paz en La Habana. Pues a mí me surgen las siguientes preguntas:

¿No pone en riesgo los diálogos de paz la negativa de las FARC para entregar los mapas de los campos minados?

¿No pone en riesgo los diálogos de paz el asesinato de un niño de un año y medio después de un ataque terrorista?

¿No pone en riesgo los diálogos de paz el asesinato de una profesora de una escuela rural el pasado fin de semana?

¿No pone en riesgo los diálogos de paz seguir asesinando miembros de la fuerza pública y población civil indefensa mientras se dialoga sobre el fin del conflicto?

¿No pone en riesgo los diálogos de paz recibir en La Habana a una delegación internacional, para conversar con las FARC, quien sabe sobre que asuntos?. ¿Alguien les dio permiso de hacer algo diferente a concentrarse en las negociaciones de paz con el gobierno colombiano?

Este Gobierno si que tendría razones para decir que una cantidad de situaciones están poniendo en riesgo las conversaciones de paz, pero por el contrario, vemos un gobierno totalmente postrado ante la actitud soberbia y pedante de estos criminales.  ¿Dónde quedó la honra de personas tan honorables como el General Mora Rangel o el mismo Luis Carlos Villegas? Miembros del equipo negociador del gobierno a los que tampoco hemos visto protestar o decir algo al respecto.

@JuMaJaRa